25 Jun, 16

Dejamos atrás Zunbeltz y contemplamos el hermoso paisaje que tenemos a nuestro alrededor. En uno y otro lado del bosque, surgían rocas que parecían haber sido colocadas a propósito. El paisaje era digno de verse.

El grupo iba hacia adelante y poco a poco las mozas se colocaban adelante con paso fresco y airoso.

A nuestro alrededor aparecían unos Susos enormes y les sacamos fotografías. Desde la cima del Dulantz ( 1.243 metros ), teníamos un paisaje formidable;  Beriain, Aratz, Aitzgorri, León Dormido, Sierra Cantabria….  y Juana, Blanca, Alicia y Socorro seguían con las fotografías.

Almorzamos en la cima y luego nos encaminamos hacia Irantzu. De paso, en el camino, Koldo, Ramón y Manolo buscaban perretxikos y la verdad es que cogieron bastantes.        Y en tanto, las chicas adelante, siempre adelante.

No le dimos mucha prisa a la marcha. En una fuente, junto al camino, pasamos bastante rato, refrescándonos, sacando fotografías…..  En una palabra, fue un caminar agradable, de conversación, bromas, buen humor…   Muy bien.

Al llegar a Irantzu, nuestros chóferes, Patxi y Eduardo junto con Glori que se apuntó a la excursión ya nos estaban esperando.  En el monasterio visitamos el claustro, unas salas, e incluso leímos unas leyendas que estaban expuestas.

Para terminar, en la Venta de Larrión tuvimos una muy buena comida. Bueno, menos el postre de Blanca, que se paseó por toda la mesa, todos lo probamos y aún así todavía quedó algo en el plato.

En definitiva, fue un buen día de monte, digno de repetirse.